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sábado, 25 de febrero de 2012

MARATON DE SEVILLA 2.012

- C R Ó N I C A - D E - M U R A Z O - I N E S P E R A D O -

   Básicamente lo que hicimos fue llegar, correr y largarnos a casa.  Con esto acabaría mi crónica que con tanto rigor esperáis. Pero entre llegar, correr y largarse existieron unas 5 horas llenas de sensaciones, sentimientos y pasión por el deporte.
 
   1ª Estación, LLEGAR: nos saltamos lo de suena el despertador, ir al baño, nos encontramos en el lugar y el viaje, que esto siempre es lo mismo.  Entramos los FRONTERIANOOOOOOOOOS! en el Estadio Olímpico de la Cartuja, (la única vez que estuve aquí, fue en un acontecimiento algo totalmente diferente -conciertazo de U2-),  frío, nervios y algo serio por mi parte al ser mi 1ª grande de mi vida.  Nos situamos en una especie de recoveco donde había un ventilador que echaba aire caliente,  algunos durmiendo otros tumbados y concentrados, unos solos y muchos en grupos tirando fotos. Se acercaba la hora, se sabía no por mirar el reloj, sino por la gran muchedumbre que entraba en los backstages. Fuera chándal, un Kg de vaselina, cordones bien amarrados y a estirar. Impresionante el vocerío, gritos, risas y sobretodo en las caras de los 5000 toreros, nervios. Nos decidimos a salir al ruedo para torear un toro de 42 kms. ¡Qué pedazo de toro!. Busca el globo dijo Alex y enseguida lo vimos. Voy a 3.30. Allí está. Una vez en la pista ya habían colocadas en posición casi los 5000 corredores que solo 6 éramos FRONTERIANOOOOOOOOOS!. Nos separamos; Manu y Pedro (nuestro buque insignia), por delante los otros cuatro. Paaaaaaa!  Pistoletazo y...

        2ª Estación, CORRIMOS: Paaaaa, pistoletazo y a correr.  Tapón en la línea de salida y salvado sin problemas, salimos del EO y el trío, Alex, mi hermano y yo, juntos. Nos adelanta Roberto que quiere darse una buena paliza. Todo perfecto, buenas sensaciones, fuera nervios y  en general, tranquilo. El ritmo de 5' el km perfecto, más lento que los entrenamientos, empezamos bien. Pasamos por una zona de césped que la gente aprovecha para regar. Pasamos por la puerta de Isla Mágica, nunca había estado antes, y una avenida impresionante de larga que al final se vislumbraba un cambio de sentido.  En el sentido contrario dos corredores, que parecían ir andando, parecían tener el mismo paso, parecían tener el mismo braceo y hasta el mismo ritmo cardiaco. Al unísono, juntos hasta final y sin parar. Un kilómetro después otro grupo,  mas tarde, esa serpiente de colores,  esa masa humana de hombres y mujeres,  maratonianos y entre todos, 6 éramos FRONTERIANOOOOOOOOOOS!  km 1, 2, 3, etc. los tres juntos, km 5 agua y a seguir corriendo. km 7,5 agua km 10 más agua y del trío se descuelga mi hermano; una palmada, un beso, un abrazo, suerte y a seguir que quedan 32. Concentrados Alex y yo, solo pendiente de la respiración,-vamos a 4.45- Inquirió Alex- hay que bajar, el problema es que vamos con el grupo, no  pasa nada si nos adelantan hay que ir a nuestro ritmo. ¡Qué bonita es Sevilla!,  km 21, hora 1:45, todo perfecto en 3:30 acabamos. Y ¿qué pasó? no lo sé, km 24 o 25 o 26, no me acuerdo. Las piernas no van, pesan. En entrenamientos corría más rápido y más distancia. NOOOOOOOOOOO! Faltan 12 o 13 km, estoy subiendo un muro. Hacemos recuento Alex, yo, mi cabeza, mi corazón, mis pulmones, todo en su sitio, ¿que pasa entonces? no lo sé. -Alex me quedo que así no llego ni de coña- Para mí la maratón comienza ahora. Pensamientos malos, David y Sonia en mi cabeza. Voy a sufrir tela pero se que puedo. Benito Villamarín a derechas y seguir corriendo. Voz en mi espalda km 32 o 33 -vaya tela- mi hermano me pasa como si fuera en moto, lo típico, besos, abrazos palmadas y a correr.  km 35 no puedo más 1ª parara y a orinar entre dos bidones.-jo que triste- Las piernas me van a reventar-, pensamiento malos, otra vez. ¿Como me he preparado para esto? ¿Qué pérdida de tiempo? tanto entrenamiento para nada, tiempo sin mi mujer e hijo para nada, si lo sé no entreno.

Cruzamos el  río Guadalquivir y me adelanta hasta Groucho Marx. El muro cada vez más duro y una pincelada de humor, el risitas-macarrone con tomate y patata-, me paro, le doy la mano y sigo. Voy fatal, a cada paso que doy es como si fuera descalzo y la planta del pie golpea contra el suelo. Me paro en todos los avituallamientos a beber y seguir sufriendo. Creo que las ampollas de glucosa no sirven para nada. Observo de lejos al EO, pero aún queda. Aún queda tela, no sé a que ritmo voy 6' o 7' el km. Un corredor delante mía saca el móvil llamando a la novia -me retiro, no puedo mas- yo aprieto los dientes por enésima vez y sigo, y sigo porque nadie me ha regalado nada en esta vida, sigo por pasión a este deporte, sigo por amor a mi mujer y mi hijo que tantas horas les he quitado, sigo por mi hermano que cuantos km me ha seguido, sigo por mis padres, que nos educaron a  los tres como leones, sigo por el grupo, sigo por David y Sonia, y sobre todo sigo por mi.

Cada vez mas cerca, cada vez mas grande, parece una montaña, entro en el túnel abajo, un padre empujando a su hija discapacitada en silla de ruedas, ESO ES UN PADRE!. Entro en la pista, la curva de meta del km 42 y el público chillando, por fin entro en meta.  LO HICE, no me lo puedo creer, ha costado tela pero escalé el muro 04:06h. tanto entrenar, para nada. Estoy reventado. Camino y me ponen una toalla en la espalda, me siento en una silla, se me saltan dos lágrimas, respiro hondo grito y me levanto. Me cuelgan una medalla y busco al grupo que me esperan con ansia. Pedro (buque insignia) llegó hace una hora.

       3ª Estación, NOS LARGAMOS: montados en el coche en menos de una hora en casa. Cambio de impresiones, pero poca charla ya que básicamente lo que hicimos fue llegar, correr, y largarnos a casa.

Realizado por: Carlos